La 30ª jornada de la Premier League estuvo marcada por el clásico que
disputaron Liverpool y Manchester United en el templo de Anfield y en el cual brilló un nombre
por encima del resto, el de Juan Mata.
El burgalés se reivindico firmando un gran partido, marcando dos goles –el segundo
una volea preciosa- para dejarle claro a Louis
Van Gaal que él está para ser titular por encima de otros jugadores con más
nombre pero que están aportando muy poco al equipo.
En el otro bando destacó
negativamente hablando Steven Gerrard.
El gran capitán salió para comenzar la segunda parte y a los 45’ segundos de estar
sobre el verde fue expulsado con roja directa por una feísima entrada sobre Ander Herrera. No podemos imaginar una
peor manera de despedirse de su último clásico. Sin embargo, sus compañeros
jugaron mejor con 10 que con 11 e incluso recortaron distancias con un buen gol
de Sturridge ante el que De Gea quizás pudo hacer algo más. Los red devils sufrieron hasta el último
minuto entre otras cosas porque Wayne
Rooney falló un penalti, o mejor dicho, porque Mignolet se lo paró.
La derrota deja a los de Brendan Rodgers como el equipo más
perjudicado de la jornada, pues todos los demás aspirantes a entrar en puestos Champions ganaron sin olvidar que el United coge una distancia de 5 pts.
respecto a ellos. El otro equipo de Manchester,
el City de Manuel Pellegrini, se impuso sin problemas a un WBA que acusó la temprana expulsión de McAuley, una expulsión con cierta polémica
porque el infractor de la falta fue Dawson,
y que cometió dos fallos defensivos en los dos primeros goles que de buen seguro
no le gustaron nada a Tony Pulis. Bony y Fernando penalizaron dichos errores mientras que Silva marcó el 3-0 al desviar un
disparo de Jovetic. Los citizens no obstante siguen a 6 pts. del
Chelsea, que ganó en Kingston Upon Hull ante un equipo el de
Steve Bruce que se repuso
francamente bien del 0-2 (Hazard, Diego
Costa) con el que se pusieron los blues antes de llegar a los 10 primeros minutos
de juego. Elmohamady y Abel Hernández, este aprovechando un
gravísimo error de Courtois,
igualaron un choque que acabo siendo decidido por un tanto de Loïc Rèmy.
El Arsenal, tercero en la tabla, también sacó adelante su complicada
visita a St. James Park gracias al
doblete de Giroud y a las buenas
intervenciones de David Ospina que
evitaron el 2-2 en una segunda parte que arrancó con la diana de Sissoko. Sus grandes rivales del Tottenham tampoco fallaron ante un
combativo Leicester. El gran
protagonista del encuentro fue sin duda Harry
Kane, pues cerró la semana con un hat-trick y con la llamada de Roy Hodgson para ir con la selección
nacional. El 4-3 final se completó con un auto gol de Schlupp y con los tantos visitantes de Vardy, Morgan y Nugent.
Los spurs siguen empatados a puntos
con el Southampton, quien se impuso
por 2-0 a otro equipo de la zona baja, el Burnley,
gracias al acierto de Shane Long y
al de Jason Schackel, aunque este no estuvo demasiado acertado pues se equivocó
de portería.
Uno de los focos
principales de la jornada estaba puesto en Upton
Park donde Dick Advocaat
debutaba en el banquillo del Sunderland
y lo hizo con derrota por “culpa” de Diafra
Sakho, autor del único gol del partido. La suerte para el técnico israelí
es que sus demás rivales también pincharon. El Aston Villa no pudo confirmar su recuperación ante el Swansea de Bafétimbi Gomis mientras que el QPR cayó en casa frente a un Everton
que suma +9 respecto a las posiciones de descenso. Por el contrario, el Crystal Palace cerró su permanencia de
manera virtual al imponerse por 1-2 en Stoke-On-Trent.
No hay comentarios:
Publicar un comentario