La de hoy será una tarde
tensa, angustiosa y evidentemente más larga que la de ayer y que la de mañana.
Después de comer y verse la habitual doble sesión de Aquí no hay quien viva, el reloj empezará a ralentizar y las horas
comenzarán a pasar de manera lenta, muy lenta.
Las ganas de que llegue la hora
del partido amenazan con pasar un buen rato en youtube rememorando encuentros de un pasado no muy lejano y hazañas
mágicas en forma de remontadas tales como las de la Liga del clavo ardiendo
–especialmente el 4-3 contra el Espanyol
con el gol de Higuaín en el último
suspiro-, la victoria por 3-2 ante el
Getafe (2007/08) o más recientemente las dos últimas Copas del Rey ante el Barcelona
o la final de la Champions League de
la pasada temporada con ese gol de Ramos
en el 93’ que sirvió para llegar a una prórroga en la que el Madrid certificaría su décima Copa de Europa. Todos este material
cinematográfico hace que la espera sea mucho más amena a la vez que provechosa
para ir cogiendo confianza y pensar en que la noche irá por donde tiene que ir,
aunque después es muy posible que todo se haya ido al garete por culpa de un
gol de Fernando Torres en el primer
minuto de juego, algo que de ocurrir no cambiará mi ritual antes de los
partidos grandes como el Real
Madrid-Atlético de Madrid de esta noche.
Las bajas marcan el partido y la eliminatoria
La mala suerte que está
teniendo con las lesiones el Real Madrid
en este final de temporada es digna de un mal de ojo o de cualquier otro tipo
de magia oscura que se precie, pues hasta tres jugadores titulares (Modric, Bale y Benzema) se quedan fuera de la convocatoria por diferentes
problemas físicos mientras que Marcelo
lo hace por cuestiones del reglamento. Aunque la ausencia del brasileño es
francamente importante visto el daño que ha demostrado poder causarle al Atlético, la baja de los otros tres es
mucho más preocupante si tenemos en cuenta que a lo largo de esta temporada
ninguna de las opciones que conforman habitualmente el banquillo merengue han
demostrado poder ser una alternativa fiable, y menos para afrontar un encuentro
de esta envergadura. Por el contrario, Fabio
Coentrão sí parece un buen sustituto si recordamos su buen
rendimiento en las grandes citas. Es evidente que no tiene la capacidad de irse
arriba y romper barreras que si tiene Marcelo
con su explosiva y alegre energía, pero se ha ganado poder confiar en él.
Por decirlo de alguna
manera, la “culpa” la tiene Carlo
Ancelotti. El técnico italiano ha dejado patente que no es muy amigo de las
rotaciones y eso a la larga pasa factura. Cuando todos están en forma y sin
problemas de lesiones la cosa puede ir tan bien como para romper todo los
récords y sumar 23 victorias consecutivas. Ahora, si la mala fortuna se ceba
contigo y te deja sin algunos de tus mejores jugadores, nunca está de más tener
preparados algunos relevos de garantías
para no alterar la línea positiva del equipo. No es el caso, evidentemente.
Jugadores menos habituales como Illarramendi,
Jesé – desde su vuelta- o Chicharito Hernández apenas han gozado
de la confianza de Ancelotti en lo
que llevamos de temporada y es por eso, por esa falta de confianza, que sus
actuaciones no han trascendido nunca y eso causa cierta inquietud en Chamartín ya que, como mínimo, dos de
estos tres serán de la partida.
Las opciones de Ancelotti
Lo lógico sería que Isco Alarcón cubriera la baja de Luka Modric en el centro del campo, tal
y como hizo en los tres meses en los que el croata causó baja por el
arrancamiento del tendón proximal del recto femoral izquierdo que sufrió en Noviembre, pero la ausencia de Gareth Bale puede ser el causante de
que el malagueño arranque el partido partiendo desde una de las dos bandas, con
James por la otra, para dejar un
puesto en el centro del campo que tendría dos candidatos, Sami Khedira o Asier
Illarramendi. Por lo que se ha hablado estos últimos días, el ex de la Real Sociedad tiene muchos números de
ser el acompañante de Toni Kroos en
la sala de máquinas, lo que permitiría al alemán estar algo más liberado para
poder pisar el área contraria con mucha más asiduidad de la habitual. En esta
circunstancia, y siempre que Ancelotti
mantenga el 4-4-2 que ha utilizado
en los últimos grandes partidos para cuando toque defender, Chicharito debería ser quien complete
el ataque junto a Cristiano Ronaldo
en lugar de Karim Benzema.
La carta de Jesé también está ahí tanto para
acompañar al portugués como para jugar en el sitio de Bale, algo que determinaría la entrada en el once de Illarramendi o Chicharito Hernández respectivamente.
La decisión final del
preparador italiano tendrá que basarse en los últimos enfrentamientos ante el Atlético de Madrid. El plan del Cholo Simeone pasa por no presionar en
exceso a los centrocampistas madridistas para no dejar espacios que pueda
aprovechar la BBC (hoy sin Benzema y Bale) obligando al Madrid a basar sus ataques en centros laterales
donde la zaga rojiblanca impone su altura y su físico para contrarrestar
cualquier amenaza. Para evitar esto, Modric
se presuponía un jugador fundamental, sobre todo en el penúltimo o último pase,
tal y como pudimos ver hace 8 días en el Vicente
Calderón, y sin él toda esa responsabilidad de jugar por dentro recaerá en Isco y en James.
Debe dar un paso al frente
Uno de los grandes
méritos del Atlético de Madrid a la
hora de enfrentarse al conjunto blanco es la de anular el tridente ofensivo que
forman Gareth Bale, Karim Benzema y Cristiano Ronaldo. Esta noche los dos primeros no van a estar sobre el césped
del Bernabéu y debe ser CR7 quien se
encargue de llevar al Real Madrid
hacia las semifinales de la Champions
League dejando atrás sus últimas actuaciones frente al equipo colchonero, actuaciones nada destacadas
para lo que se espera de un jugador de su nivel en encuentros de esta magnitud,
que sea decisivo. Para ello cuenta con la inestimable colaboración de James Rodríguez, con el que mantiene
una conexión formidable dentro del terreno de juego que alimenta las esperanzas
de su afición. El colombiano debe poner ese último pase que no podrá dar Luka Modric para que el portugués
finalice ante la meta de Oblak.
Junto a Isco y Cristiano, James es la
mejor baza para poder estar en el sorteo del próximo viernes donde se decidirán
los cruces de semifinales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario